Descripción
Celebremos la Recuperación’ está diseñado para ayudar a las iglesias de cualquier tamaño en el inicio de uno o más grupos de recuperación, proporcionando las herramientas para los líderes que guiarán el programa. Un programa de recuperación basado en ocho principios de las bienaventuranzas: 1. Reconozco que no soy Dios. Admito que no tengo poder para controlar mi tendencia a hacer lo malo y que mi vida es inmanejable. 2. En una forma sincera creo que Dios existe, que le intereso y que Él tiene el poder para ayudarme en mi recuperación. 3. Conscientemente decido comprometer toda mi vida y voluntad al cuidado y control de Cristo. 4. Una apertura para un autoexamen y confesión de mis faltas a Dios y a alguien en quien confío. 5. Para que Dios pueda hacer los cambios en mi vida, me someto voluntariamente a Él y con humildad le pido que remueva mis defectos de carácter. 6. Evalúo todas mis relaciones. Ofrezco perdón a aquellos que me han hecho daño y enmiendo los daños que he ocasionado a otros, excepto si cuando al hacerlo les dañara a ellos o a otros. 7. Reservo un tiempo diario con Dios para una autoevaluación, lectura de la Biblia y oración con el fin de conocer a Dios y Su voluntad para mi vida y obtener el poder para seguirla. 8. Al rendir mi vida a Dios para ser usada puedo llevar estas Buenas Nuevas a otros, tanto con mi ejemplo como con mis palabras.
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