Algunos le llaman “el cambio de vida”. Ciertamente lo es, ¡y no siempre es bienvenido! Todos esos calores intensos, lapsus de memoria, cansancio y luchas emocionales pueden no ser todos igualmente graves, pero sin duda está experimentando los efectos del envejecimiento.
Aunque a menudo el mundo intenta convencernos de que envejecer representa una pérdida de valor, Amy Baker y Daniel Wickert ofrecen una visión más bíblica que se centra en conocer y confiar en Cristo. Poner su esperanza en Dios y en su amor por nosotros nos hará crecer y fructificar a medida que le vemos obrando constantemente en cada etapa de la vida para hacernos más semejantes a Él.
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