Muchos libros han relatado la crucifixión y resurrección, pero nunca antes el lector había sido llevado a los reinos invisibles para presenciar el poder de la cruz desde la perspectiva de Dios el Padre.
Descubrirás un nuevo mundo de significado en la muerte de Cristo al ser testigo de la destrucción de los sistemas del mundo, la aniquilación de la ley, el fin de la raza caída de Adán… y la muerte de la Muerte. Esta es una obra dramática de poder y profundidad que la literatura cristiana ha alcanzado pocas veces, si es que alguna vez lo ha hecho.
El día que fui crucificado, contado por Jesús, de Gene Edwards, ahora ocupa su lugar entre las grandes obras de la literatura cristiana. Seguiremos leyendo este libro dentro de 200 años, y seguiremos llorando (y alabando) mientras lo hacemos.
Este es uno de esos raros libros que transforman vidas.
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